¿La cebras son blancas con rayas negras, o negras con rayas blancas? by Psusie
¡Está claro! Son producto de una noche de camembert de Dalí.
Anoche llovía mucho y muy fuerte, y tronaba que casi daba miedo. No obstante, las ventanas del salón no se volvieron a abrir dando bandazos. Pero los pajaritos que cantan todas las noches entre las tres y las cuatro de la mañana no lo hicieron anoche; y yo sabía que había personas, ancianos y niños y mujeres y hombres pasando frío y hambre en la calle, pero me preocupaban esos pajaritos que no cantaron anoche. Y no sé por qué.
Actualización muy rápida, que hasta las ocho no empezará mi puente.
Por cierto, que Mercury tuvo la amabilidad de pensar en mí para una de sus tantas y tan interesantes secciones de su blog, con entrevistas a lolitas de ambos lados del charco. Espero que lo disfrutéis, ¡a mí me ha encantado!
¡Claro que sí! Mi madre sueña con volver a Marbella y librarse de su atolondrada hija, que acudirá a los brazos de las lolitas malagueñas en busca de consuelo y donuts (L)
Pon un lacito en tu vida.
Imagina que el mundo es de color gris. Imagina que el mundo es monótono, la vida aburrida y el tiempo cansado. Imagina levantarte cada mañana a una hora escandalosa y dolorosamente temprana, lavarte la cara con agua helada y vestirte con una ropa… indescriptible, quizá la palabra sea “siemprelomismo”, “uniforme” o algo así. Imagina que el mundo es como esa ropa, y tus ojos lo ven a través de esos cristales tan grises.
Cambiar el mundo no es sencillo, pero no imposible. Cambiar tu mundo es sencillo. Casi basta sólo con querer. Después hay que hacer, pero la mayor parte es querer. Querer con el corazón. Y entonces imaginas, porque imaginar es muy importante, que ves de otro color. Y se hace realidad.
Imagina que no te fijas en el color del mundo cuando te levantas. Imagina que te despiertas, abres tus ojos, parpadeas, sonríes al nuevo día, te levantas. Lavas tu cara, cambias tu ropa… y añades algo más. Una cucharadita de azúcar en el desayuno. Un chorrito de optimismo al día. Un pellizco de coquetería, de ser bella con el mundo.
El detalle puede ser el que tú quieras, el que tú necesites. El que tú imagines. Puede ser una flor, puede ser un pañuelo bordado al cuello, puede ser un lacito.
Pon un lacito en tu vida. Del color que sea, del material que sea. Pon un lacito en tu corazón, otro color y forma de ver la vida.
Abre los ojos a un mundo lleno de detalles, brocados y encajes que escapan a la vista del distraído atareado, pero presentes para quien los busque con amoroso tesón. Ten siempre presente que la belleza está ahí, sólo hay que mirarla, verla, disfrutarla, hacerla si es posible.
Para mirar el mundo bien hay que tener la mirada limpia, inocente como la de un niño. Hay que buscar y saber ver las flores de un mundo que la mayoría cree marchito.
Ayuda a alguien. Siempre hay quien lo necesita. Además, la felicidad es mayor si hay más gente feliz contigo.
Cuida una planta. Te maravillarás al ver cómo crece, cómo alza sus hojas a los rayos del sol.
Redescubre los sabores. Cocina para ti y para los demás, combina sabores y texturas, como una deliciosa pintura.
Lee un buen libro. Dijo Hermann Hesse que da más felicidad escribir versos malos que leer los más bellos; busca palabras bellas también en ti.
Recuerda siempre que estas palabras son consejos, pero que la verdadera sabiduría está en saber obrar correctamente ante cada situación.
Mas no cierres tus oídos: si puedes, si quieres, si te hace feliz, pon un lacito en tu vida, cerca del pecho, del corazón.
Gracias, natsi. Por poner un lacito en mi vida (y por todo lo demás).
Creo que te equivocaste de persona, pero ¡gracias! :)
En realidad, últimamente me han hecho sentir como una persona bastante maravillosa. Que no digo que sea verdad, ni mentira, ni una mezcla de los dos: sólo digo que hay quien se toma la inmensa molestia de tratarme tan bien. Y es muy bonito.
Puedo salir a las nueve de la noche de clase y pasar frío y saber que en ese momento estoy sola, pero que hay quien me hace sentir maravillosa.
Ojalá que le pasara a todo el mundo, ¿verdad? Debería ser un derecho humano.
¿Tienes algún objeto que te resulte tan inspirador o tranquilizador que podrías estar mirándolo durante horas? Un besito. Fukai by Entrophy
¡Muchos! Como soy tan asquerosamente materialista, siempre encuentro algo que me guste y que me cuente una historia. También me pasa que me gusta tener cosas que aparezcan en mis historias, como por ejemplo el pajarito dorado de Claire Fontaine :)
Y otra ¿Tienes alguna musa a la hora de escribir? by Entrophy
Viene cuando le da la gana, pero siempre es bien recibida (aunque sea de madrugada, algunas veces xDU). También tengo una amiga a la que apodamos Musa, pero fuera de eso... Supongo que los mismos autores influencian en mayor o menor medida.
¿Cuales son los nombres de chico y de chica que más te gustan? (Pd: soy Circe, me he hecho una cuenta aquí) by Littlecirce
¡Uy, no sabría decidirme! Además con tantos idiomas... Mis dos últimos protagonistas se llaman Jacques y Claire, y me gustan bastante, pero también Amélie, Daniel...
Hoy me voy con mi Jacques personal, que compra bombones y no canta, pero abraza muy fuerte.
4- Voy a intentar ahorrar. Intento no mirar tiendas (menos la de natsi).
5- En mis apuntes hay una representación de la estructura de la inteligencia y el aprendizaje con forma de (redoble de tambores)… octaedro. Pienso entenderlo sí o sí.
6- En el sobre del vestido de mi hermana, viene impreso un pajarito. No es dorado, pero me lo va a guardar.
7- Vuelvo hoy a clase, una semana antes que el resto ._.U
